“Cuando México nos manda gente, no nos mandan a los mejores. Nos mandan gente con un montón de problemas, que nos traen drogas, crimen, violadores…”. Comentario destacado de Donald J. Trump, el 16 de junio de 2016, durante un discurso de lanzamiento, competente a su candidatura para las próximas elecciones presidenciales en su país.
¿Sobre qué argumentos se atreve hacer tal afirmación? Evidentemente, para todas las personas informadas respecto al tema, la suya, es una postura absolutamente refutable.
¿Acaso pues, Alejandro G. Iñárritu, Rodolfo Neri vela, y muchos otros mexicanos triunfadores en la nación vecina, son personas conflictivas en aquel país? No, son personas honradas, trabajadoras y emprendedoras, que posiblemente, debido a las escazas oportunidades de laborar en México, tuvieron que desviar su mirada hacia la Primera potencia mundial, que se encuentra contigua a nuestra nación.
El desprecio de Trump orientado hacia el pueblo mexicano es inconfundible, y además de este ejemplo ya expuesto, muchas veces ha recaído en la postura de lanzar ataques verbales y amenazas -irracionales todos- en contra de los mexicanos, cegado por su creciente rencor hacia el país.
Su intención ha sido transmitir por medio de su gira electoral, su odio hacia los mexicanos entre la población norteamericana. Allí es donde reside el meollo del asunto. Existen actualmente millones de mexicanos que radican en Estados Unidos. ¿cuál será el peso entonces de su voto en las futuras elecciones?