“the flames are all gone,
but the pain lingers on.
goodbye, blue sky…”
Goodbye, blue sky. Pink Floyd.
Hasta el 12 de febrero del 2017, estará en el Museo de Arte Contemporáneo de la UNAM la exposición Azul Prusia del artista mexicano Yishai Jusidman; esta escena artística se compone por una serie de pinturas elaboradas mediante fotografías originales de los escenarios que dieron lugar al exterminio judío, la Shoa, así mismo, contado desde el silencio y lo inanimado, en esencia, de los objetos: de las puertas, los muros y los ladrillos.
El azul Prusia, es un color creado artificialmente y descubierto en 1704 por el químico Heinrich Diesbah; también era el color del uniforme del ejército prusiano y posteriormente de los militares de Napoleón. En las cámaras de gas, en medio del exterminio judío, se utilizaba un químico nombrado ZyKlon B, o ácido cianhídrico o prúsico que ocasionaba que al finalizar una jornada de asesinatos mediante gases que ahuyentaban el oxígeno y la vida, los muros, las tuberías, todo lo demás quedara cubierto, por efecto del químico nombrado, del azul de Prusia.
La obra de Jusidman se presenta como un llamado, siempre necesario, a la memoria. La transmutación de las imágenes originales a través del azul, de cierta forma melancólico, y por las pinceladas cargadas de realidad, son muestra de la destreza y de la inmersión que el artista realizó en el proceso de creación y construcción. También se refleja en el conjunto artístico, una reflexión política sobre las huellas imborrables de la historia, es decir, sobre lo que se queda adherido en los muros como testimonio de un hecho determinado que habla hacia el futuro para evitar su posterior ocurrencia o para dar consuelo sobre la construcción de una “verdad” que se teje a diario.
Pasen a verla.